True/False Indicate whether the
statement is true or false.
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¡Qué paraíso! Lee el texto
sobre Xcaret y decide si las afirmaciones son ciertas (C) o falsas
(F).
Xcaret Xcaret es un parque ecológico en la Riviera Maya, cerca de Playa
del Carmen (México). Está ubicado entre selvas y hermosas playas
blancas. Antiguamente este sitio se llamaba Polé y era un puerto comercial maya; por eso una
de las atracciones del parque es la zona arqueológica. Se requiere un día completo para
visitar Xcaret puesto que hay una gran variedad de actividades, por ejemplo: pasear por un río
subterráneo, bucear en los arrecifes de coral, visitar un impresionante acuario, conocer las
tortugas marinas y mucho más. Dado que Xcaret es un entorno natural de gran valor
ecológico, no se permite pescar, tirar basura, llevar alimentos o usar crema solar que no sea
biodegradable. Todas las noches, Xcaret ofrece un espectáculo cultural en el que
se representan tradiciones indígenas como el juego de pelota, un deporte prehispánico
que consiste en meter una pelota en un aro de piedra sin usar las manos ni los pies. También
hay artistas que realizan bailes típicos de todas las regiones de México. Los
visitantes pueden alojarse en un hotel que está al lado del parque en régimen de
pensión completa. Este establecimiento ofrece todas las comodidades de un hotel de lujo. Por
supuesto, también es posible hospedarse en la turística Playa del Carmen, donde se
encuentran todo tipo de alojamientos, desde hoteles hasta albergues y zonas de
cámping.
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1.
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Xcaret es un parque ubicado en el centro
histórico de la Ciudad de México.
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2.
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Se pueden ver ruinas en Xcaret porque antes era un
puerto maya.
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3.
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Seguro que se puede bucear y pescar en el parque
Xcaret.
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4.
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Los visitantes pueden ver el juego de pelota siete
veces a la semana.
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5.
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Los visitantes también se pueden hospedar en
Playa del Carmen.
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Multiple Choice Identify the
choice that best completes the statement or answers the question.
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Actividad 6. Tema curricular: La belleza y la
estética Introducción Este cuento es del escritor uruguayo Mario Benedetti. Lo
escribió en 1955 y fue publicado en 1959, dentro de su libro Montevideanos. Habla de los
sentimientos que provoca el circo en Carlos, un niño de siete años.
Esa boca
Su entusiasmo por el circo se venía arrastrando desde tiempo atrás.
Dos meses, quizá. Pero cuando siete años son toda la vida y aún se ve el mundo de los
mayores como una muchedumbre a través de un vidrio esmerilado, entonces dos meses representan un
largo, insondable proceso. Sus hermanos mayores habían ido dos o tres veces e imitaban
minuciosamente las graciosas desgracias de los payasos y las contorsiones y equilibrios de los
forzudos. También los compañeros de la escuela lo habían visto y se reían con
grandes aspavientos al recordar este golpe o aquella pirueta. Solo que Carlos no sabía que eran
exageraciones destinadas a él, a él que no iba al circo porque el padre entendía que
era muy impresionable y podía conmoverse demasiado ante el riesgo inútil que corrían
los trapecistas. Sin embargo, Carlos sentía algo parecido a un dolor en el pecho siempre que
pensaba en los payasos. Cada día se le iba siendo más difícil soportar su
curiosidad.
Entonces preparó la frase y en el momento oportuno se la dijo al padre:
«¿No habría forma de que yo pudiese ir alguna vez al circo?». A los siete
años, toda frase larga resulta simpática y el padre se vio obligado primero a sonreír,
luego a explicarse: «No quiero que veas a los trapecistas». En cuanto oyó esto, Carlos
se sintió verdaderamente a salvo, porque él no tenía interés en los trapecistas.
«¿Y si me fuera cuando empieza ese número?» «Bueno», contestó el
padre, «así, sí».
La madre compró dos entradas y lo llevó el
sábado de noche. Apareció una mujer de malla roja que hacía equilibrio sobre un
caballo blanco. Él esperaba a los payasos. Aplaudieron. Después salieron unos monos que
andaban en bicicleta, pero él esperaba a los payasos. Otra vez aplaudieron y apareció un
malabarista. Carlos miraba con los ojos muy abiertos, pero de pronto se encontró bostezando.
Aplaudieron de nuevo y salieron —ahora sí— los payasos.
Su interés
llegó a la máxima tensión. Eran cuatro, dos de ellos enanos. Uno de los grandes hizo
una cabriola, de aquellas que imitaba su hermano mayor. Un enano se le metió entre las piernas y
el payaso grande le pegó sonoramente en el trasero. Casi todos los espectadores se reían y
algunos muchachitos empezaban a festejar el chiste mímico antes aún de que el payaso
emprendiera su gesto. Los dos enanos se trenzaron en la milésima versión de una pelea
absurda, mientras el menos cómico de los otros dos los alentaba para que se pegasen. Entonces el
segundo payaso grande, que era sin lugar a dudas el más cómico, se acercó a la baranda
que limitaba la pista, y Carlos lo vio junto a él, tan cerca que pudo distinguir la boca cansada
del hombre bajo la risa pintada y fija del payaso. Por un instante el pobre diablo vio aquella carita
asombrada y le sonrió, de modo imperceptible, con sus labios verdaderos. Pero los otros tres
habían concluido y el payaso más cómico se unió a los demás en los porrazos
y saltos finales, y todos aplaudieron, aun la madre de Carlos.
Y como después
venían los trapecistas, de acuerdo a lo convenido la madre lo tomó de un brazo y salieron a
la calle. Ahora sí había visto el circo, como sus hermanos y los compañeros del
colegio. Sentía el pecho vacío y no le importaba qué iba a decir mañana.
Serían las once de la noche, pero la madre sospechaba algo y lo introdujo en la zona de luz de
una vidriera. Le pasó despacio, como si no lo creyera, una mano por los ojos, y después le
preguntó si estaba llorando. Él no dijo nada. «¿Es por los trapecistas?
¿Tenías ganas de verlos?»
Ya era demasiado. A él no le interesaban los
trapecistas. Solo para destruir el malentendido, explicó que lloraba porque los payasos no le
hacían reír.
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6.
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¿Cuál de las siguientes afirmaciones
resume mejor el sentimiento de Carlos por el circo tal y como se describe en el
cuento?
a. | Carlos no tenía demasiado interés por el
circo.
| c. | A Carlos le daba envidia que sus hermanos y sus
compañeros hubieran ido al circo y él no. | b. | Carlos sentía una gran curiosidad por el
circo. | d. | Carlos sentía una gran fascinación por los payasos y los
trapecistas. |
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7.
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Según el cuento, ¿por qué
razón Carlos no había ido nunca antes al circo?
a. | Carlos era demasiado pequeño para ir al
circo.
| c. | A Carlos no le hacían gracia las imitaciones de los
números de circo que hacían sus hermanos. | b. | Su madre no tenía tiempo para llevarlo. | d. | Su padre
temía que se impresionara mucho al ver a los
trapecistas |
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8.
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¿Cuál de las siguientes frases resume
mejor la primera experiencia de Carlos en el circo?
a. | Con excepción de los payasos, a Carlos no le
interesó demasiado el espectáculo del circo. | c. | (C)
Carlos se rio mucho con el número de los payasos. | b. | (B) Carlos prestó mucha atención a los números circenses con
caballos y monos. | d. | (D) Carlos se sintió muy triste por no poder ver a
los trapecistas. |
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9.
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Según narra el cuento, ¿qué hizo
Carlos para conseguir ir al circo?
a. | Carlos pidió insistentemente a su padre que lo
llevara al circo. | c. | Carlos fingió tener un dolor en
el pecho para que lo llevaran al circo. | b. | Carlos
renunció a ver a los trapecistas con tal de ir al circo. | d. | Carlos
convenció a su madre para que fuera al circo con él. |
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10.
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En el texto, ¿cuál de las siguientes
afirmaciones explica mejor el significado de la frase «Por un instante ... labios
verdaderos» (líneas 34-36)?
a. | El payaso, vestido de diablo, sonrió al ver al
niño tan asustado. | c. | Tras la sonrisa pintada del payaso, el
niño vio una leve sonrisa llena de sinceridad. | b. | El payaso se acercó un instante al niño y luego
desapareció. | d. | El pobre payaso le regaló al niño una gran
sonrisa pintada. |
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11.
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¿Qué se puede deducir sobre el
carácter de Carlos?
a. | Era reflexivo y sensible. | c. | Era espontáneo y alegre, le gustaban mucho los
payasos. | b. | Era un niño serio, no le gustaban los chistes ni
las peleas. | d. | Era impaciente y travieso. |
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12.
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¿Qué es lo que más asombró a
Carlos del espectáculo de circo?
a. | Carlos asistió a las peleas absurdas de los
payasos. | c. | Carlos descubrió la verdad que hay tras la sonrisa
pintada de un payaso. | b. | Carlos se dio
cuenta de que la gente se reía incluso antes de que los payasos hicieran sus
chistes. | d. | Carlos descubrió que a su madre no le gustaban los
payasos. |
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13.
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¿Por qué lloraba Carlos cuando
salió del circo?
a. | (A) Porque el payaso más grande se acercó
mucho a Carlos y él se asustó. | c. | Porque
Carlos sintió mucho no poder ver a los trapecistas. | b. | Porque a Carlos le dio pena ver el gesto triste y cansado del
payaso. | d. | Porque los payasos no le parecieron
graciosos. |
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14.
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Según el cuento, ¿cuál es la
principal emoción que los payasos provocaron en Carlos?
a. | Los payasos le hicieron reír. | c. | Carlos sintió una profunda tristeza. | b. | Provocaron su asombro. | d. | Sintió alivio
cuando por fin los vio. |
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